Muchas veces cuando nos sentimos atrapados en situaciones repetitivas en nuestra vida, que pueden ser dolorosas y hasta traumáticas, regularmente nos sentimos frustrados y sobre todo nos vemos impotentes por no saber que hacer y lo que es mas, no conocemos el origen de los sucesos, y nos asaltan las preguntas como: " Porque a mi? ", " Dios, que he hecho " " No lo puedo creer, ¡ otra vez..¡ " etc.
Pero como todas las cosas de la "Mente" la reacción es frecuentemente: llorar y luego dejarlo pasar, así no hay mas preocupación, no le damos la importancia que los hechos ameritan y nos limitamos a vivirlos desde la aceptación, tomando la opción regularmente de: 1) diferir las situaciones o 2) Justificarlas con cualquier aforismo positivo o creencia que nos permiten sobrellevar el hecho, como: " Si Dios lo quiso así" , " Si Dios Quiere" , "Al mal tiempo, buena cara" etc. etc. y en ese momento, es lamentable, pero instalamos el "Sufrimiento"
Últimamente estamos (debido a las redes) muy bombardeados de estos aforismos, que pueden convertirse en creencias arraigadas en nuestro inconsciente y desde mi visión, podemos correr el riesgo de tener un anclaje que nos aleja de la responsabilidad personal en la situación que aqueja en el momento, reforzando el Sufrimiento y manteniendolo por mucho tiempo hasta llegar al extremo de verlo normal y útil.
A diferencia de los sucesos referidos al "Cuerpo" en este caso, tenemos otra reacción, aquí no diferimos, aquí actuamos, ya que el cuerpo nos moviliza debido al dolor, este nos hace reaccionar y buscar la solución, para dejar de sentir dolor. Y en su momento no importa ni siquiera buscar el origen, solo interesa quitar el Dolor, no estamos hechos para soportarlo. Por esta razón, podemos tener enfermedades que se pueden manifestar levemente con un dolor y la reacción primaria es eliminarlo, no buscar el origen. Logrando así que las mismas se conviertan en crónicas, hemos silenciado el mensaje de la enfermedad.
Lo que nos lleva a deducir, que el SUFRIR lo podemos tener y sostener por mucho tiempo, pero el DOLOR, solo por unos momentos.
Ahora bien, todo en la vida tiene un origen, en donde DOLOR Y SUFRIMIENTO, no están exceptos de la regla. Solo que estamos tan llenos por creencias que nos hacen ver ambos aspectos de manera diferente.
En Psicogenealogía que es el Estudio del árbol genealógico, decimos que si algo se repite, es porque busca la sanación, pero ¿cuantas veces se toma consciencia de los hechos repetitivos que se han tenido, bien en el contexto: DOLOR o SUFRIMIENTO? , sobre todo tomando en cuenta que debido a las creencias, estos hechos pasan regularmente de forma inadvertida, silenciosa y los vemos como naturales.
Si queremos sanar siempre debemos partir de: 1) asumir la responsabilidad personal en los hechos y tomar consciencia de lo vivido, ya que sino reconocemos lo que pasa: DOLOR O SUFRIMIENTO no tendremos la ayuda para sanar y 2) buscar el origen de los mismos, solo así encontraremos la raíz de lo vivido.
El estudio del árbol genealógico, desde la visión Psicoterapéutica que practico, en donde combino: Terapia Familiar, Gestalt, Psicogenealogía y Metagenealógica, conformando así una excelente herramienta de trabajo, les ayuda a identificar los focos repetitivos y sobre todo encontrar su origen para transitar el camino de la sanación en las situaciones que conllevan Dolor y Sufrimiento. Les invito a experimentar este trabajo.
Termino con una frase de uno de mis grandes y queridos maestros, Alejandro Jodorowsky,
Comentarios
Publicar un comentario